Es posible que en tu casa sólo tengáis una cafetera moka o espresso, en las cuales el único desperdicio que encontraremos son los posos de café, que, aunque te parezca increíble, puedes usarlos para un montón de cosas, como ya explicamos en este artículo sobre como no desperdiciar los posos del cafe.
Pero podría darse el caso de que uséis otro tipo de cafeteras, como las de goteo, o cualquier otra que use filtros de café, que es de lo que vamos a hablar hoy.
Estos filtros están hechos normalmente de papel o tela, y aunque te los vendan para un único uso, lo cierto es que se pueden reutilizar. ¿Y por qué querrías reutilizarlos? No es que sean especialmente caros, pero quizá si te importa un poco reducir el impacto medioambiental al hacer café, esto sí que podría interesarte.
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Los filtros de café
Para empezar, hay que ver que los filtros de café suelen fabricarse en papel, metal, tela y plástico, y en principio, los de papel son de uso desechable.
Aunque los filtros de papel originalmente se usaban en la industria química, la inventora Melitta Bentz probó a usarlo para filtrar café, que además, disminuía el amargor de la bebida.
Y a pesar de todo, el café es un tipo de ingrediente que aunque manche el papel, se puede enjuagar y quitar del filtro para poder usarlo en otra extracción de café o otros usos que veremos más adelante.
Estos filtros, aunque sean de papel, son delgados y absorbentes, pero bastante resistentes, normalmente tienen una forma cónica y son de color blanco, aún cuando están fabricados de fibra vegetal. Y es por esto que, si no es en más extracciones de café, podremos aprovecharlo para otros usos.
¿Cuán reutilizables son los filtros de café?
Como ya mencionamos arriba, hay varios materiales de los que están hechos los filtros de café. Y aunque obviamente los filtros de tela, metal o plástico son reutilizables y pueden aguantar cientos y cientos de preparaciones de café sin desgastarse, los de papel nos los venden como desechables.
Y por eso es que la gente, tras un único uso, los suele tirar a la basura. Pero la verdad es que se pueden usar más de una vez.
Debido a que estos filtros son bastante resistentes, absorbentes y finos, se usaban, como ya mencioné, en la industria química, y más adelante se usaron en la preparación de café, eliminando su amargor pero manteniendo el resto de características.
Pero lo que debes tener en cuenta si quieres reutilizar los filtros de café de papel, es que estos sean de fibra vegetal y sin blanquear, ya que son lo suficientemente resistentes para soportar el lavado y así poder reutilizarlo.
Reutilizar los filtros de café
Es posible que los más sibaritas del café sientan esto como una ofensa a la preparación del café, pero es la verdad, estos filtros de papel se pueden usar más de una vez antes de desecharlos.
Estos filtros de café son capaces de resistir varios usos, incluso aunque estén mojados o húmedos. Y es por esto que el primer método de reutilización será justo ese: Una vez termines de hacer el café, tira los posos, o guárdalos para usarlo en otras cosas y lava con agua el filtro para eliminar los posos. Tras esto, déjalo escurriendo hasta el día siguiente, y verás que esta listo para preparar otro café.
Las otras opciones, son obviamente, usar filtros de otros materiales, que ya están pensados para reutilizarse, o bien plantéate cambiar de cafetera a una sin filtros, y te quitas de problemas y comederos de cabeza a la hora de prepararte tu café.
No solo sirven para el café
Lo cierto es que estos filtros de papel son útiles para varias aplicaciones en el hogar, pues sabiendo que valen para filtrar incluso productos químicos, nos pueden hacer un buen uso para otras coas.
Por ejemplo, uno de sus usos más interesantes sería el filtrar aceite usado, ya que el aceite pasará a través del filtro, atrapando todos los restos de quemado que se nos quedan flotando en el aceite cuando hacemos un rebozado. O si eres de tomar té, y por cualquier razón se te rompe la bolsita o se te abre el porta té, soltando toda la hojarasca en tu taza, filtrarlo con este filtro de café de papel te ahorrara tener que tirarlo todo y empezar de nuevo.
Si tienes alguna planta aromática que te guste, con estos filtros de café puedes montar unos estupendos ambientadores caseros, cerrándolo con las gomitas y colgándolo donde quieras. Si no tienes plantas aromáticas en casa, también lo puedes usar para colocar el purificador de ambiente, o pastillas de olores.
Gracias a su forma cónica, el filtro de café es ideal para tapar cosas. Por ejemplo, si se te ha roto el corcho de una botella de vino, o has perdido el tapón de cualquier bote, el filtro de café es un perfecto sustituto, lo colocamos tapando el morro, y lo puedes ajustar con una goma para que no se caiga. Y hablando de tapar, gracias a su tamaño, pueden servirte también para tapar alimentos que no se guardan en la nevera, para evitar que los insectos se posen sobre ellos.
Si por lo que sea se te ha roto la cafetera, estos filtros pueden ser usados para preparar café a la vieja usanza. Tan solo coloca el café molido en una olla con agua caliente unos segundos después de que deje de hervir, y apaga el fuego, removiendo sin parar. Tras unos minutos, coloca el filtro en un recipiente suficientemente grande, y deja pasar nuestra agua infusionada, mientras retenemos los posos de café.
¿Cuántas veces se te han estropeado las sartenes simplemente por apilarlas en un armario? Pues los filtros de café son una idea estupenda para colocar entre sartenes u otras ollas o utensilios, evitando así que se choquen directamente y por consiguiente, alargar su vida útil.
¿Tienes zapatos negros o marrones que necesiten un pulido? Pues los filtros de café usado, aunque no te lo creas, van de lujo para este fin. Recuerda que durante la extracción, el café segrega aceites y otras substancias, y parte de estas se quedan en el filtro, permitiéndonos aprovecharlo para este tipo de situaciones.
Otro uso para adecentar nuestra casa, es el de aprovechar sus cualidades para limpiar ventanas. Estos filtros de café no dejan pelusas, por lo que extenderán el producto limpiador sin dejar marcas. Y quien dice ventanas, dice las lunas y el parabrisas del coche. Un poco de flus flus para cristales y frota con el filtro, quedarán perfectas.
¿Recuerdas cuando hablábamos de los beneficios de aplicar máscaras de posos de café sobre tu piel? Pues los filtros de café usados también te ayudarán con estos tratamientos de belleza, ayudando a relajarla y a embellecerla.
Si eres de los que les gusta hacer adornos de navidad, una vez lavados y secados, los filtros de café son ideales para hacer guirnaldas u otras decoraciones, como coronas navideñas, de estas que se cuelgan en la puerta de casa. De hecho, son un material estupendo para manualidades, y hasta los niños pueden usarlo en sus proyectos para el cole. Por ejemplo, se pueden hacer hermosas flores pintándolas con distintos colores.
Además de ambientadores, como mencionábamos antes, también puedes hacer bolsitas de olores con estos filtros de café. Si dentro le colocas unas hojas de lavanda y cerramos la bolsita con una cinta, el armario y tu ropa absorberán este agradable aroma.
Si tienes plantas en casa, el filtro de café es una estupenda opción para colocar debajo del macetero, permitiéndote aislar la tierra del agua, pero haciendo que esta se mantenga húmeda gracias a las propiedades absorbentes del filtro.
¿Necesitas conseguir zumo de naranja o limón, pero te da pereza sacar el exprimidor? Prueba a introducir los gajos del cítrico en el filtro de café y aprieta con fuerza, verás como exprimes la fruta sin problemas y sin manchar el exprimidor que tanto trabajo da limpiar. Además, conseguirás separar la pulpa de manera eficaz.
Y por último, si no quieres reutilizar los filtros para nada de esto, pero sí que quieres ayudar a cuidar el medio ambiente, tira los filtros de café de papel sin blanquear al montón del compost en vez de a la basura. Al estar hechos de fibra vegetal, pueden descomponerse y ser parte de algo más en su siguiente vida.
El filtro de café en el hogar
Quizá los filtros de café son uno de esos objetos que puedes encontrar en una casa de la manera más inesperada. Puede que en algún momento se compraran para una cafetera que ya ha pasado a mejor vida, pero los filtros siguen por ahí rondando. Y dado que son duraderos, probablemente sigan en perfecto estado para poder seguir usándolos, ya sea para hacer café o para cualquiera de las cosas que comentamos antes.
Y de hecho, si usas este tipo de cafeteras, puedes llegar a ahorrar una cantidad de dinero razonable reutilizando los filtros una o dos veces. Tras estos usos, puedes seguir reutilizándolos para manualidades, limpieza, o cualquiera de los usos interesante de los que hablamos en el apartado anterior.
Por lo tanto, ya sabes, la próxima vez que prepares café, plantéate si te interesa reciclar el filtro una o dos veces más, ya sea para aportar tu granito de arena al cuidado del medioambiente, como para ahorrarte un dinerillo, o conseguir material de manualidades para tus hijos.
¿Y con los posos de café qué hago?
Aunque tenemos un artículo que explica con detalle todos los usos que podemos hacer de los posos, vamos a hacer un resumen para terminar el artículo.
Ya que vas a reutilizar los filtros del café por la razón que sea… ¿Por qué parar ahí? Aprovecha todo lo que deja tu cafetera tras la preparación de ese delicioso café matutino, y guarda los posos para cualquiera de sus múltiples usos.
Por ejemplo, al igual que el filtro, puedes usar los posos de café a modo de mascarilla exfoliante, ya que gracias al poder abrasivo que poseen, limpiarán tu rostro tan solo con frotar un poco. Y además, estarán aportando propiedades de la cafeína y otras substancias a tu piel, haciendo que quede tersa y brillante.
Y hablando de poder exfoliante y abrasivo, también sirven para limpiar los cacharros en la cocina. Si tienes algún quemado o resto de comida que no sale ni a la de tres, pon un poco de poso de café y frota, verás como termina despegándose.
En definitiva, tanto los filtros como los posos de café tienen muchas utilidades y una segunda vida útil tras la preparación del café, así que no esperes más, y aprovéchate de sus ventajas, que total, si te vas a hacer un café, es un material que vas a tener en casa siempre.
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