Seguramente a lo largo de nuestras vidas, hemos hecho más de un viaje para el cual nos ha tocado madrugar y salir a prisa, con la esperanza de tomar un café o algo para desayunar en alguna cafetería o estación de servicio en alguna de las paradas que haremos.
Y a medida que avanzamos en nuestro viaje, nos vamos poco a poco arrepintiendo de no haber metido nada en nuestro estómago, y esas estaciones de servicio y cafeterías parecen no aparecer nunca…
Para estos casos, y muchos otros, hay un invento que seguramente conoces y has utilizado más de una vez, pues existe desde hace muchos años: El termo.
Este recipiente permite mantener caliente nuestro café o la bebida que queramos durante horas, permitiéndonos degustarlo en mitad del viaje sin necesidad de parar, o si estamos en una caminata, o incluso de acampada. Hay muchas situaciones en las que el termo nos puede ser de utilidad, y por eso hoy vamos a ver que tipos hay y cuales pueden venirnos mejor.
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¿Qué es un termo?
Un termo es un recipiente que, mediante una estructura interna especifica, permite mantener la temperatura de los líquidos en su interior, el café incluido, obviamente. Hay varios tipos, los más antiguos se dividían en varias piezas, normalmente una exterior de plástico en la que ponemos agua caliente o fría según que temperatura queramos mantener, y una pieza interior de aluminio. También suelen tener una rosca para cerrar completamente la zona entre ambos recipientes y mantener el calor lo máximo posible.
A día de hoy, hay termos más sencillos de una sola pieza, y no llevan ese agua caliente entre dos piezas, si no que simplemente el metal y la tapa del recipiente suele tener una goma para asegurar el hermetismo y maximizar el tiempo que aguantará caliente.
Origen del termo
Parece ser que la invención del termo se remonta a 1892, en Escocia. Sir James Dewar, investigador del Royal Institution of London, realizaba estudios sobre criogenia, intentando conseguir un envase o recipiente capaz de transportar y aislar oxígeno líquido.
Tras probar diversas propuestas, finalmente surgió la idea de utilizar un recipiente de vidrio que, introducido dentro de otro metálico, se aislaría al vacío, obteniendo el mecanismo base para lo que conocemos en la actualidad como termo. Este invento fue patentado en Alemania en 1903, por Reinhold Burger, quien trabajaba como soplador de vidrio en una empresa a la que Dewar estaba asociada. Así pues, Burger decidió comercializarlo, dándole el uso que conocemos hoy en día.
Entre otras cosas, el éxito de este producto se debió a distintos factores, entre ellos el principal era el precio. El termo era económico, y además, permitía transportar las bebidas con facilidad gracias a su sistema hermético. A parte, su principal cualidad, la de mantener el liquido de su interior frío o caliente por más tiempo, era revolucionaria.
A día de hoy, los termos suelen ser fáciles de lavar, ya que se dividen en varias piezas, y los tenemos de muchos diseños y tamaños diferentes.
Tipos de termo
Al igual que nuestras necesidades, los termos han ido evolucionando con el tiempo, y, a día de hoy, disponemos de una gran cantidad de termos de diversos tipos, tamaños y formas, que se adaptan a distintas situaciones de nuestra vida.
Ordenados por tamaño, podemos encontrar en el mercado:
- Taza térmica
- Vaso térmico
- Termo
- Jarra térmica
Además, pueden variar también según su tipo de aislamiento. Tenemos el de aire, que sería el original, el de espuma, el recubierto de cobre u otro metal, y el recubierto de porcelana. Cualquiera de estos métodos funcionará para mantener tu café, u otra bebida, a una temperatura ideal.
¿Qué termo escoger?
Cada persona es un mundo, por lo que en función de tu situación, habrá termos mejores que otros, por lo que vamos a ver un poco que es lo más importante a tener en cuenta para comprar el termo que más vaya con tu estilo de vida.
Capacidad
Este sea, quizás, el dato más importante a tener en cuenta. ¿Es un termo sólo para ti? ¿Sueles ir con tu familia de picnic? ¿Sueles viajar en pareja? En función de esto, debes decidir el tamaño. Normalmente, una taza de café suele rondar los 160-240 ml, pero hay gente que prefiere tomar más cantidad, pero más diluida, o que este más concentrado aunque sea menos. En función de esto, puedes decidir el tamaño ideal de tu termo.
Puede que pienses que escoger el más grande y así te vale para todo, pero quizá eso no sea tan recomendable como crees. Piensa que a más tamaño, obviamente más va a ocupar, y por ejemplo, no es lo mismo cargar en una caminata con un termo de 500ml de café que con uno de 2 litros.
Aislamiento
Ya sea para mantener el frío o el calor, la calidad del material aislante será primordial para llevar a cabo esta tarea. Por lo tanto, en función del tipo de uso que le vayas a dar, te interesará invertir un poco más en un buen termo, o quizá te sea suficiente con uno más básico.
Por lo general, los más baratos, y por ende, que guardan peor el calor o el frío en nuestro café, son los hechos de estaño, plástico o cerámica. Puede que aun así te sean útiles si lo que quieres es por ejemplo, llevar tu café al gimnasio, y lo vas a consumir en un tiempo relativamente corto desde que lo viertas en el termo.
Como lo que buscamos en un buen termo es reducir la transferencia de temperatura, uno de los mejores materiales por los que puedes optar es el acero inoxidable de doble pared, aislado al vacío. Este es uno de los mejores aislantes, lo que hará que el calor no pueda escaparse de tu café, manteniéndolo más tiempo a la temperatura perfecta.
Si te preocupa que el acero le de regusto a tu café, también te interesará saber que a día de hoy, la mayoría se fabrican con los metales electro-pulidos. Esta técnica permite que las bebidas, como el café, no se vean tan afectadas por olores y sabores metálicos.
Diseño
Hoy en día, se le da mucha importancia a que las cosas que utilizamos sean lindas, o a la moda. Algunos diseños como estampados adorables de dinosaurios, llamas, osos perezosos u otros animales están a la orden del día en casi cualquier artículo, ya sean tazas, libretas, bolígrafos… pero que sea bonito no lo es todo.
Así que además de eso, cuando vayas a escoger tu termo para café, fíjate también en su comodidad y utilidad. Suena algo tonto, pero que sea fácil de abrir y cerrar es muy importante. Algunos termos usan un sistema de tapón, que a veces te obliga a hacer fuerza, y puede que te salpiques, los de rosca, por otro lado, te ocuparan las dos manos mientras bebes. Una vez más, depende del uso que le vayas a dar.
También es importante que consigas un termo con sistema de cierre hermético y anti goteo. No querrás meterlo en tu mochila y que cuando vayas a beber, todo lo que había dentro huela a café y este mojado.
Otro punto importante es que sea fácil de limpiar. Algunos termos son alargados, pero no demasiado anchos, lo cual facilita su transporte, pero a la hora de limpiarlos, si no son desmontables, puede que no consigas llegar al fondo con la esponja, y tendrás que apañártelas como puedas.
Por último, con respecto a lo anterior, que sea fácil de transportar también debe ser uno de los factores primordiales, ya que, aparte de mantener tu café caliente, un termo lo vas a querer para llevar tu infusión a dónde quieras.
Entonces, ¿Qué termo compro?
Bien, ahora que sabemos los tipos y cualidades que pueden tener los termos para café, vamos a ver algunos de los termos que puedes encontrar en el mercado, para que puedas escoger el que mejor se adapte a ti.
Taza Byron SnapSeal
Este termo tipo botella, es el termo más solicitado y vendido gracias a sus características. Su precio es asequible, su capacidad de 590ml es ideal para una persona, y además su sistema de aislamiento es de acero inoxidable, que como dije arriba, es el mejor.
Además de que sea de acero inoxidable, este termo de café dispone del sistema «Thermalock», que garantiza hasta 7 horas de café caliente. Y no debes preocuparte por manchar, ya que dispone de tapa anti goteo.
Hablando de su tapa, esta esta diseñada para usarse con una sola mano, sin tener que quitar ni desenroscar nada a la hora de beber, por lo que es perfecto para ir al gimnasio, y bueno, realmente para cualquier actividad. ¡Más cómodo siempre es mejor!
YETI Rambler
La principal cualidad de este termo para café es, además de su diseño elegante y sencillo, su sistema de apertura y cierre magnético.
Aparte de la comodidad de su sistema magnético, el YETI Rambler esta fabricado con un sistema de aislado al vacío en acero inoxidable de doble pared, como comentaba arriba, la mejor opción.
Además, al igual que el Byron Snapseal, su tamaño de 590ml es ideal para una persona, e incluso puede valer para compartir un café que estará en perfectas condiciones de temperatura, cuerpo, sabor y calidad sobre 5 horas.
La parte exterior tiene un sistema de revestimiento DuraCoat, lo que lo hace resistente a golpes y roces, además de permitir que no se resbale ni te moje las manos con la condensación. Ideal para café frío y caliente.
Termo Stanley, el cásico
Quizá no sea el más práctico, al contrario que el snapseal o el YETI, pero sin duda, es el que más recordamos. Si te imaginas el típico picnic en familia, este termo no puede faltar en la estampa. A pesar de que su tamaño no es el más práctico, si que es uno de los que más tiempo mantendrá en perfecto estado tu café.
También fabricado en acero inoxidable de doble pared, este termo suele tener una capacidad de 500ml, medio litro de bebida caliente para toda la familia. Es uno de los termos con más capacidad del mercado y mantendrá tu café frío o caliente por unas 15 horas.
Ten en cuenta, eso sí, que no será tan cómodo de transportar ni de servir. Este es uno de esos termos que tienen una tapa que puede usarse de taza y luego una tapa de rosca, que es la importante, ya que es la que nos garantiza mantener la temperatura. Acuérdate de enroscarla bien cuando termines de servir el café.
Tronco o Vaso de vidrio
El vaso térmico Tronco esta elaborado con materiales reciclables, y tiene un diseño sencillo y limpio, por lo que si te preocupa la sostenibilidad del planeta, esta es una buena opción.
Al contrario que los anteriores, el Tronco esta fabricado con, seguro que lo has adivinado, vidrio. Además la parte exterior, que protege el cristal, es de silicona, lo que además, facilita su agarre, y evitará que se te resbale.
La tapa está fabricada con madera, y viene un una pajita para beber.
Quizá no sea el termo que mas tiempo aguantará la temperatura de tu café, pero si que será el que mejor mantendrá su sabor y aroma.
A parte de estos, hay otros muchos termos interesantes en el mercado, con distintas capacidades y tamaños.
Espero que puedas encontrar el termo ideal para ti, y que así puedas degustar tu café favorito en cualquier momento y cualquier lugar.
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