Los polos opuestos se atraen, y al ser humano le fascina combinar cosas que están en estos puntos tan alejados, ya sea en las historias y leyendas con la luz y la oscuridad, o en la gastronomía con los dulces y salados.
Y por supuesto, una de esas contraposiciones que nos fascina es la combinación de alimentos fríos y calientes. Desde el helado de menta con chocolate caliente, hasta el Brownie preparado a la portuguesa, que se sirve caliente y con una bola de helado encima, hasta lo que más nos gusta aquí, el café.
Hay muchas recetas que mezclan el café caliente con hielo o helados fríos, como el café azteca o el S’mores frappe, y el caso de hoy es similar: el café Affogato.
La palabra affogato, de origen italiano, significa literalmente ahogado y se le adjudica su creación al fray Angélico, un famoso fraile franciscano de la provincia de Cuneo en la región del Piamonte italiano que vivió durante el siglo XVII.
Se dedicaba a la preparación de licores, especialmente el licor de avellanas, que a día de hoy conocemos como frangélico, y el licor café.
Y un día, de inventos culinarios y pruebas, se le ocurrió mezclar helado de vainilla con su café espresso.
Contenidos
El origen del café Affogato
El helado lleva siendo un postre popular desde la antigüedad, y en Italia, al igual que pasa con el café, existe una importante cultura de este frío alimento hecho a base de leche, huevos y azúcar.
Esta mezcla se aromatizaba con otros productos, y algunos de los más populares a finales del siglo XVII eran, además del chocolate, el café.
A pesar de que el origen del affogato se suponga con el fraile franciscano, la popularización del affogato llegó en los años 50. Se extendió por Italia junto con la industrialización del helado, que hasta la segunda guerra mundial, se hacía con nieve almacenada en el invierno.
La popularización de las heladerías las hicieron casi tan comunes como los bares y se convirtieron en un icono del «Bel Paese». Durante esos años, principalmente en verano, los helados comenzaron a «ahogarse» en los cafés espresso.
Este café llego a popularizarse incluso en Estados unidos, principalmente en Nueva York, después de su gran éxito en Italia. Aunque es cierto que en este país a día de hoy, a diferencia de Europa y especialmente Italia, ha perdido popularidad.
La caída del café affogato
Esta caída del affogato en Norteamérica se debió a que, en 1992, George Howell creó el, a día de hoy famosísimo, frapuccino, que usaba un helado suave para hacer una especie de batido, y que suplanto rápidamente al affogato.
Además, Howell fue uno de los pioneros en Estados Unidos, durante las décadas de los 70s y 80s, en popularizar el movimiento del café de especialidad, con tres locales en Massachussets que, aún a día de hoy, siguen abiertos y listos para servir café.
Y aunque lo más seguro es que a día de hoy conozcas el frapuccino por la multinacional Starbucks, lo cierto es que esta compró en 1994 los locales de George, la cadena Howell’s, y en el pack venía incluido su estilo de tostado, la marca, y las recetas, entre las cuales estaba, por supuesto, el famoso batido de café.
Como todos sabemos, Starbucks es conocido en todo el mundo, y en ese momento pudo popularizar el frapuccino a nivel nacional quitando la atención del café affogato.
Existen muchas variantes del café affogato, como por ejemplo la del chef Jaime Oliver, que sugiere utilizar cucharadas de helado de vainilla con crocante de almendras tostadas y con amaretti o biscotti empapado en café tostado. También sugiere usar las sobras de los postres navideños como las mousses de chocolates o tarta para colocar debajo del helado.
¿Qué es un café affogato?
Aquí es donde se plantea la gran pregunta, postre que utiliza una bebida o bebida que aprovecha un postre.
Realmente el ingrediente protagonista de este postre italiano es el café espresso, pero al llevar el helado como elemento dulce, se le considera antes postre que bebida.
Aún así, mientras no te hagas tu propio helado, es una receta muy sencilla y se ha mantenido con el paso de los siglos.
Puedes encontrarlo en prácticamente cualquier bar o restaurante de Italia ya sea en su preparación original o con alguna de sus variantes.
La receta del café Affogato
Requiere solo dos ingredientes y es muy fácil de preparar en cualquier momento pero te recomiendo tener una copa o vaso con base estrecha y una cuchara.
Ingredientes
- Helado fior di latte o vainilla
- Café espresso
Preparación
A pesar de ser una preparación sencilla, requiere de ciertos detalles, el primer paso es el helado.
En la copa que hayas decidido usar, agrega una cucharada de helado fior di latte o vainilla, lo ideal es que sea una cucharada generosa, pero depende de tu gusto personal.
A continuación, agrega la taza de café espresso alrededor de la bola de helado, no la eches encima de esta por que si no la derretirás al momento, y queremos que se valla fundiendo lentamente.
¡No pierdas tiempo, y degusta esta exquisitez antes que se derrita del todo!
Consejos
El mejor espresso lo vas a conseguir con una cafetera moka o con una máquina de espresso doméstica, que están específicamente preparadas para esta elaboración.
La idea de usar un vaso con base estrecha es que así el helado no llega al fondo de este y al agregar el café se forman capas, abajo el café oscuro, después la bola de helado nadando en el liquido y arriba la espuma del espresso.
Es recomendable que la copa esté helada para que el helado no se derrita tan rápido, solo tienes que dejar la copa en el congelador un par de horas antes de preparar tu café affogato.
Puedes variar el sabor del helado, pero lo cierto es que la receta original es con fior di latte, helado que solo lleva leche, azúcar y almidón, sin huevos. Sin embargo, si no encuentras este sabor o no te interesa, puedes usar helado de vainilla, que es lo más parecido a la receta original.
Por supuesto, también puedes usar cualquier helado a tu gusto siempre que te agrade como combina con el café, que aquí lo importante es disfrutar.
Los helados frutales y muy ácidos y los helados de agua o tipo sorbete no son la mejor combinación para mezclar con café, ya que sus sabores no cuajan bien, y además al estar hechos de agua congelada, tu café se aguará, no como con el helado a base de leche, en el cual se combinarán de manera cremosa.
También puedes agregar otros ingredientes según el gusto personal, por ejemplo sirope de chocolate, galletas o un chorrito de licor, para darle chispa. Los licores más recomendados en caso de querer echarle son el Amaretto, Bailey’s o cualquier licor cremoso de frutas o frutos secos, los aguardientes y el licor de avellanas o incluso el licor café.
Cómo tomar el café Affogato
Este café se sirve con cuchara para poder comer el helado antes de que se derrita, mezclándolo con el espresso y cuando el helado ya esta demasiado derretido como para seguir usando la cuchara, se puede beber como un café normal.
Pero es importante sentir los diferentes contrastes que se ven en su presentación, el frio mezclado con el calor, lo dulce mezclado con lo amargo, junto a los matices de una extracción perfecta del café.
Variaciones del café affogato
No existen limitaciones reales en como degustar este café y puedes probar cualquier variación, como con helado de chocolate o caramelo. O también puedes probar el llamado affogato corretto, un affogato acompañado de brandy o grappa, es decir, con licor. Hay quien lo hace con Kahlúa o licor cremoso de whisky.
Otras variantes serían sustituyendo el café por alguna variedad de té aromático, que combine con lácteos, o un chocolate caliente.
Puedes probar también el caldo freddo, una preparación más elaborada pero que sigue el mismo principio de frio y calor: En este caso se coloca un bizcocho bañado en licor por debajo de la capa de helado italiano, te recomiendo uno de sabor café, y por encima una crema batida con sirope de chocolate caliente.
También puedes usar la receta del affogato y, pasándola por una licuadora, convertirlo en una bebida frappe, el Frapuccino en casa.
Si prefieres cambiar el sabor directamente desde el café, solo tienes que cambiar la preparación del espresso, ya sea cantidad de espresso o como lo extraigas, la intensidad del postre variará acorde a como prepares tu café.
Prueba preparando un affogato con un ristretto doble en lugar de un espresso y conseguiras un café mucho más intenso y, por tanto, un sabor con más matices y contrastes entre el dulce y el amargo.
Para acabar
El affogato no deja de ser un café clásico, que ha evolucionado en otras versiones, como el frappuccino, pero al final, el sabor original y la manera de consumirlo, es única y no la podrás experimentar en versiones más modernas.
Además del efecto visual, la bola de helado haciendo isla, mientras el café inunda el vaso, y lentamente va derritiendo el dulce postre, creando capas de café cremoso abajo, y espuma de espresso arriba, el sabor que se obtiene con esta mezcla puede variar a medida que lo degustas, pues el café amargo se irá endulzando a medida que el helado se vaya deshaciendo.
Y esto convierte a este café no solo en una delicia, si no en toda una experiencia que cualquier amante de esta bebida debería probar. No lo dudes, ¡Y aprovecha este verano para invitar a tus amigos a degustar un café affogato!
Si quieres conocer más recetas con café, puedes visitar otros artículos:
- Lo más clásico: La receta del Café Cappuccino
- ¿Quién no lo conoce?: Café Vienés
- Para los golosos: Cómo preparar un buen Café Azteca
- Refréscate en verano: Salted Caramel Iced Coffe y Café Dalgona
- Para los aún más golosos: Cómo preparar un buen café S´mores Frappe
- Clásico de Starbucks: El café de otoño, Pumpkin Spice Latte
- Las mejores recetas: Cafés de Starbucks
- Más recetas: Starbucks 2
- Delicia para el verano: Granizado de café
- Ingredientes inesperados: Café con mantequilla
- Más ingredientes inesperados: Café con sal
- Postres de café sin horno: Tres deliciosas recetas
- Postres de café con horno: Cuatro deliciosas recetas
- Los postres más fresquitos: 2 recetas para el verano
- Para reposteros avanzados: Recetas más complejas de café
- El pastel definitivo: Coffe Pound Cake