Habitualmente, el café es una de las primeras cosas que hacemos para comenzar el día, de tal manera que acaba convirtiéndose en una costumbre, como muchas otras actividades de nuestra vida cotidiana.
Sin embargo, hay momentos de nuestra vida que pueden cambiar bastante todas estas conductas, siendo una de ellas el embarazo: puede implicar un cambio de dieta, dejar de tomar ciertos productos como carnes procesadas o alcohol, y esto nos lleva al artículo de hoy.
Una pregunta que se repite muchísimo en los foros, en los artículos especializados, en las búsquedas de Google, es si existe una relación nociva entre el café y el embarazo, o lo que es lo mismo
Contenidos
¿Puedo tomar café estando embarazada?
Una universidad, en concreto la Universidad de Reikiavik, en Islandia, sostiene que, realmente, no existe una dosis diaria máxima de cafeína para las mujeres en estado de gestación, ni las que están buscando quedarse embarazadas. Esta aseveración, nos hace estar seguros de que lo mejor, es prescindir total y absolutamente del consumo de café.
Afirmaron que el consumo de café en exceso, provocaba, abortos espontáneos, muerte fetal, bajo peso al nacer, talla más pequeña para la edad gestacional del bebé, y leucemia aguda infantil. Todo estos problemas, asociados a la cafeína, fueron publicados en BMJ evidence based medicine.
Aunque la reacción de la comunidad médica y científica no se hizo esperar, si que fueron cautelosos, y de ahí salieron más de 40 estudios sobre el tema, en menos de dos décadas, pero siendo mucho más activos en los últimos años.
Esta no es la única universidad que ha hecho estudios referentes al riesgo de la cafeína en el embarazo, ni mucho menos.
Otros estudios sobre el embarazo y el café
Katherine L Grant de la división de investigación intramuros de la salud de la población del instituto nacional de salud infantil y desarrollo humano Eunice Kennedy Shriver de lo NIH, aseguró en una de sus charlas que los resultados obtenidos en sus estudios, sugieren que lo prudente es limitar o renunciar a todo tipo de alimento o bebida, que contenga cafeína.
El consejo de la Organización Mundial de la Salud consiste en limitar el consumo de cafeína durante el embarazo, ya que en exceso, la cafeína puede ser asociada a restricciones del crecimiento, y un bajo peso del bebé al nacer, parto prematuro, o muerte intrauterina. Aconsejan a las mujeres embarazadas, que tomen más de 300 mg de cafeína al día, que reduzcan su consumo de forma inmediata.
Los investigadores de los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos, publicaron en la revista Jama Network Open, un artículo en el que afirmaban que, con tan solo media taza de café al día, las mujeres embarazadas daban a luz bebes más pequeños que las embarazadas que no tomaban absolutamente nada de cafeína.
El Colegio Estadounidense de Obstetras y ginecólogos, enunciaron una opinión en 1998, que reafirmaron en 2018, en la que aseveraban que el consumo de cafeína, moderadamente, no parecía ser un factor de riesgo de aborto espontáneo, ni de parto prematuro, pero sí que podía suponer dificultades en el crecimiento del bebé, pese a no ser precisadas.
Uno de los estudios, se analizaron los datos de más de 2000 mujeres de diversidad racial y étnica, con embarazos de entre 8 y 13 emanas. Eran no fumadoras, y no había enfermedades previas al embarazo.
En la semana 10, a cada mujer se le hizo un análisis de sangre para buscar rastros de cafeína y de paraxantina, que es el compuesto que se produce en nuestro cuerpo cuando la cafeína se descompone. Otra de las cosas que tenían que informar era de la ingesta de bebidas con cafeína, fuese café, té, refrescos o bebidas energéticas, durante la semana previa a la analítica, desde que se inscribieron, y a lo largo del embarazo.
Los bebés de las madres que tomaban más cafeína pesaban una media de 84 gramos menos y medían 0.44 cm menos que los bebés de madres que no habían probado cafeína, y 0.28 cm menos de circunferencia craneal.
Las mamás que bebían media taza de café, aproximadamente, al día, sus bebes tenían menos peso al nacer, sobre 66 gramos menos que las abstemias, y sus muslos una circunferencia 0.3 cm más pequeña.
Consecuencias de la cafeína en el feto
Se observó que la cafeína, hace que los vasos sanguíneos del útero y de la placenta, se vean contraídos, asi que se reduciría el flujo de sangre al feto, inhibiendo su crecimiento normal.
También se cree, que la cafeína podría alterar las hormonas del estrés fetal, exponiendo al feto a un rápido aumento de peso después de su nacimiento, obesidad, enfermedades cardiacas, y diabetes.
Y al hilo de esto, es importante destacar que existe un trabajo realizado por científicos noruegos, que en el 2018, y basándose en datos recogidos en 51000 bebés y sus respectivas madres, que nos explica que, debido al consumo de café durante el embarazo, la cafeína hacia que los niños a los ocho años de edad, pesasen más de medio quilo más que los niños cuyas madres no habían probado la cafeína.
Los autores de ese trabajo, afirmaban que evitar el consumo de café, o cualquier producto con cafeína, totalmente, evitaría que las probabilidades de que los niños de entre 3 y 5 años de edad de madres que bebían, durante el embarazo, café o similares, tuviesen sobrepeso.
También es verdad que estos estudios nos hablan de causa efecto, a partir de estudios observacionales comparativos, por lo que son solo datos estadísticos, pero no se ha comprobado que la cafeína sea la causa directa de dicho sobrepeso, ni del bajo peso al nacer, ni del parto prematuro, ni de ninguno de los efectos anteriormente mencionados.
Lo único que sabemos con absoluta seguridad, es que la cafeína tiene la capacidad de traspasar los tejidos, incluida la placenta, y que durante el embarazo, el organismo es más ineficaz a la hora de deshacerse de la cafeína. Esta es la causa de recomendar que no se consuma, pero aún nos queda esperar a que nos den datos concluyentes y no estadísticos de todo esto.
Pero se ha hablado mucho en este artículo sobre las dosis de cafeína, cuanto era mucho, cuanto poco, máximos recomendados, etc pero ¿Cuánto café es eso?
¿Cuánto café significa máximo recomendado para una embarazada?
Vamos a partir de la premisa de que una taza de café solo, normal, son 50 ml. El máximo recomendado de cafeína diaria, es de 200 mg, esa taza ya tiene 133 mg de cafeína, por lo que con una taza y media de café, ya hemos superado esa marca. Hablamos, claro, de café solo, expresso. Si hablamos de café instantáneo, con leche, se necesitarían, aproximadamente, 5 tazas.
No podemos olvidarnos de que el café descafeinado tiene cafeína, menos, pero la tiene. Eso sí, te harían falta tomar más de 100 tazas al día, para llegar a esa cantidad máxima. No debemos olvidar que los refrescos de cola tienen cafeína, está la teína, etc.
No hay que olvidar esto último. Para tomarse esos 200 mg de cafeína, habría que beber diariamente dos litros de refresco de cola al día, pero el problema de que una embarazada tome esta cantidad, ya no es solo un problema con la cafeína, sino también con el alto contenido en azúcar de esas bebidas. Pero la teína de ciertas infusiones, también habría que revisarlas, porque no son cantidades desdeñables.
Dos taza de té, de unos 200 ml cada una, ya que son más grandes que las de café, ya alcanzan esos 200 mg de cafeína.
Si quieres saber más sobre cuidar tu salud con café, puedes visitar otros artículos:
- Las propiedades del café: ¿Cómo beneficia a nuestra salud?
- ¿Puede el café ayudarnos a reducir la diabetes?: La relación entre Café y diabetes
- Café y colesterol: ¿Es el café perjudicial para el colesterol?
- ¿Cómo afecta el café a nuestra mente?: Por qué no tomar café antes de ir a comprar
- Azúcar y café: ¿Cuánto azúcar deberías servir en tu café?
- ¿Tienes que dejar de beber café?: Síntomas de la abstinencia de cafeína
- ¿El café te causa acidez?: Trucos para evitar la acidez de estómago
- ¿De dónde viene la cafeína?: Otras fuentes de cafeína aparte del café
- Mitos y bulos: ¿El café deshidrata?
- Café en cápsulas: ¿Son peligrosas para la salud?
- Los riñones: ¿Puede el café mejorarlos?
- Ten cuidado: Evita añadir estos ingredientes al café
- Cafés para llevar: ¿Qué necesitas saber?