A la hora de buscar productos de alta calidad, debemos fijarnos en ciertos detalles. Muchas veces, el marketing nos ahorra buscarlos, gracias a términos como las marcas. Normalmente, si un producto es de una determinada marca, entendemos que es de una calidad mayor, y por ende, más caro.
Pero además de las marcas, ciertos productos pueden añadir más etiquetas de calidad, como es por ejemplo, la denominación de origen.
Cuando hablamos de denominación de origen, estamos más acostumbrados a que sea referente a vinos. Este sello nos indica que ese vino concreto, proviene de una región concreta, con uvas recolectadas en fincas de esa zona, y preparado en las bodegas correspondientes.
Al mismo tiempo, en el mundo del café también existe el término café de origen, una denominación que implica un café exclusivo y de calidad, recogido en determinadas zonas.
Como todo lo exclusivo, tiene que seguir unas normas muy concretas para conseguir dicha denominación, pues como mencionábamos, es un sello de calidad, que va a afectar directamente a su precio.
Contenidos
El café de origen: ¿De qué se trata?
Se considera café de origen a aquel café que procede de un único productor, es decir, la cosecha de café de una finca, hacienda, beneficiado, cooperativa o campo de una región o país concreto.
Esta distinción puede llegar a hacerse incluso por el tipo de suelo en el que esta la plantación o la altitud a la que se encuentra, como en el Jamaica Blue Mountain.
Todos sabemos que no es lo mismo tomar un café de India que uno de Costa Rica, pero dentro del propio país hay diferencias notables entre diferentes regiones y productores.
Por ello el café de origen resulta tan único, permite saber con exactitud de donde procede cada grano, su variedad, el tipo de cultivo y de procesado.
Es una denominación tan concreta, que puede llegar a especificarse incluso que sea una variedad específica dentro de una misma finca.
Así se consigue un café de una trazabilidad clara, pudiendo confirmar fácilmente si es un café de alta calidad y además poder analizar mejor sus características organolépticas.
El café de origen y su aumento de popularidad
A todos nos gusta poder consumir un buen café, que nos aporte no solo energía si no también una experiencia agradable gracias a sabores y sensaciones de un buen café de calidad.
Esto ha llevado a que aparezcan más tiendas especializadas en cafés de alta calidad y, más concretamente, cafés de origen.
No solo buscan ofrecer un café de calidad, si no que también buscan la innovación para aportar sabores y experiencias nuevas al consumidor de siempre.
Consecuencias de la popularidad
La subida en la demanda del café de calidad ha provocado que los productores tengan que modificar sus métodos de cultivo.
Muchos de estos productores de especialidad están empezando a desarrollar y mejorar la calidad de sus cultivos en respuesta a esta creciente demanda.
Otros están experimentando con la selección de las variedades y cultivos, el control acerca del estado del crecimiento, los periodos de cosecha y sus técnicas o los procesos de beneficio.
La calidad del café y el comercio directo
Todas estas mejoras en el café de origen se producen gracias a un comercio directo, es decir, una comunicación directa entre tostador y productor.
Los productores cuentan con los tostadores para que les informen sobre las tendencias del mercado mientras que los tostadores pueden ubicar fácilmente a productores y aprender de ellos.
La capacidad de poder visitar las fincas aportan conocimientos a los tostadores y compradores de café verde.
Lo cual nos lleva a tostadores que conocen de primera mano y de forma detallada, el impacto que tienen los procesos y cultivos en sus granos de café.
También, tanto productores como tostadores y compradores, se implican en el proceso de cata de los diferentes cafés de las fincas para poder comparar perfiles y puntuaciones de este cupping.
Así es como llega al consumidor con toda la información sobre el tipo de café, por lo que se puede notar el aumento en la calidad de los cafés disponibles.
El café de calidad: ¿Cómo se mide?
En la industria existen diferentes formas de medir la calidad de un café, como la Taza de la Excelencia o El instituto de la Calidad del Café Q.
Estos sistemas miden la calidad de los cafés, en los que suelen destacar estos cafés de origen, los cafés de finca y los micro lotes.
No son solo una guía para el consumidor, si no que también son un incentivo para conseguir el grano de mejor calidad por parte de los productores:
- La competencia de la Taza de la Excelencia reconoce la calidad y cuidados en la producción de lotes especiales. Esta es considerada como la mayor forma de reconocimiento que se puede recibir en la industria del café de especialidad.
- En el caso del Instituto de Café e la Calidad del Café Q, esta se rige por los estándares de la Asociación de Cafés Especiales de América y evalúa a nivel de la finca y el productor. Suelen dividir sus categorías entre los cafés arábicos y robustas, finos y mezclas.
- También existe el Coffe Review, un sistema invaluable para los tostadores y comercializadores, y a la vez una guía para comprar café con mayor reconocimiento e influencia a nivel mundial ya que verifica los perfiles del tueste.
Al final, estos sistemas de evaluación se encargan de cuantificar la calidad del café evitando favoritismos o preferencias.
Las catas de estos sistemas se realizan a ciegas, y con un sistema de evaluación de 0 a 100 puntos, siendo 100 lo mejor.
A pesar de que cada sistema tiene sus criterios concretos, siguen las categorías descriptivas de un catador profesional en las hojas de puntuaciones de cupping.
Los productores, ¿Qué opinan del café de origen?
Una ventaja de tener un café de origen es que lleva a un productor realmente orgulloso en la calidad de su café.
No solo se interesan por el sabor final de su café en la taza si no de como se transfiere esta al consumidor.
Los cafés de origen permiten al consumidor entender que hay detrás de un perfil especifico de café, además del amor y pasión que cada productor pone en el proceso.
Al final, queremos poder tomar el mejor café posible, por lo que tenemos que confiar en que los proveedores entiendan la calidad del producto.
Esto, además, ayuda a garantizar una sostenibilidad para todos los trabajadores de cada etapa de la producción de este café.
Y así podemos llegar hasta un tostador o un barista capaz de aportar la información de primera mano acerca de la finca y el productor del café de origen que están preparando.
Los tostadores, ¿Qué opinan sobre el café de origen?
Si nos vamos a las primeras etiquetas de café de origen, estas no significaban un café de alta calidad, si no para diferenciar café de una mezcla de un tostador.
A día de hoy, para los tostadores, un origen no es suficiente para juzgar justamente a un productor, se habla de una variedad en específico, una finca, unos días de un lote…
Sin embargo, esto no implica que la etiqueta de café de origen esté mal empleada, si no que a los tostadores les gustaría que fuera aún más exacta.
Al final, para los tostadores, fijarse en estas escalas, tergiversan las increíbles diferencias que se pueden encontrar en el café.
Consideran esta etiqueta como un simple indicador de calidad y una forma de indicar que consideran ese café increíble.
Esto no quiere decir que el origen no sea importante, solo que no es lo único que importa a la hora de tener un café de calidad.
Aun así, sigue siendo una etiqueta que solo esta presente en aquellos cafés de alta calidad, por tanto sigue siendo un sello de garantía para un buen café.
Y para el consumidor… ¿Qué implica el café de origen?
Buscando cafés de calidad es importante buscar etiquetas de cafés de origen o especialidad, pero no es lo único en lo que hay que fijarse a la hora de buscar un buen café.
A pesar de que el origen es importante, fijarse en la finca de la que proviene es más importante todavía.
Las tiendas se centran en mostrar los cafés más exclusivos posibles, por lo que acaban contactando con intermediarios dispuestos a proveerles con pequeñas cantidades de diferentes cafés en vez de una gran cantidad de un solo tipo.
Además los tostadores pueden ofrecer cafés con nombres de los productores o nombres similares a los de los vinos, cosa que coincide con el interés de las personas por resaltar la proveniencia de las comidas y bebidas en general.
Lo ideal es preguntar por los procesos post cosecha, además de el país y el perfil de tueste, ya que son los elementos principales que te ayudarán a identificar los sabores en lugar de ver una localización en el mapa.
Al final los orígenes son una forma de poder ampliar tus conocimientos sobre café y acceder a diferentes sabores y aromas.